miércoles, julio 23, 2008

...En Resumidas Cuentas

...En Resumidas Cuentas


Me senté frente al viejo escritorio y repase todo lo que ha sido de mi vida. Minúsculas imágenes desde mi infancia hasta el día de hoy, y todo lo que he vivido, se resumía en una línea, una, que estoy demasiado cansada para poderla escribir… Las hojas de lo amargo de los años pasaron y pasaron, la vista cansada, los ojos desvelados, la luz que apenas ilumina, en fin… una mirada de la chingada.


Apenas he dormido cuatro horas y quisiera recordar lo que soñé en tan sólo media. Pero, quizá, aún sigo demasiado cansada para ponerme a recordar. Con lagunas mentales, poca materia gris, sentido común oxidado, en fin, una moralidad de la chingada.

¡Qué todo se lo lleva el viento!... Que se lleve mejor toda la mierda que ha venido dejando al pasar del tiempo, al transcurrir de los años. No me siento ni más sabia ni más vieja, sigo igual, tal como he venido repasando en mi transcurrir de años, que no son muchos, pero encabezan la lista de: “Tanto que no he notado cuánto y sin embargo, nada he hecho”; es decir, un remordimiento de la chingada.

Esa era la línea que yo quería escribir y a lo que todo se resume; no digo que solamente sea así para mí, lo es para todos, sólo que no se han dado cuenta de lo afortunados que son al no poderlo notar. En pocas letras: Una humanidad de la chingada.

Ese es el destino… Lo que nos depara… Lo que nos separa de la malograda esperanza…


Un final… (‘xacto) de la chingada.



Karla Nerea V.

2 comentarios:

Alex dijo...

es cierto, muy bueno.
saludos

Anónimo dijo...

La vida es un suspiro, algo que puede variar de un momento a otro, no eres dueño de tu vida, de ti depende el sentido que le des
a la misma, de tí depende la felicidad que quieras impregnarle

Cada uno escoge su felicidad de la mejor manera posible,cada uno apuesta por ella aún sin conocerla.

A veces no nos damos cuenta que la tenemos cerquita por andar preocupados en esta vorágine que imprime la sociedad.